Es la nueva versión o mejor dicho, la versión non plus ultra, de Los Vientos del Desierto, aquella que fue abruptamente interrumpida por la semilla de la vida y que hoy ya tiene casi un año y medio…sólo espero que la distracción no me gane de nuevo, con eso de que soy etérea y me llevo bien con el viento, espero que ese mismo viento no me juegue una nueva broma y me permita seguir cantando a su lado, cantando, gritando, gruñiendo, refunfuñando, pataleando, rompiendo, llorando…lo que sea, siempre y cuando no calle mi murmullo.
Y hablando de vientos, lamento decirte que a mí me aterra cuando el viento azota las ventanas y las puertas, cuando sopla tan fuerte que parece que trae voces inciertas.
Esa furia intangible es terrible…
A propósito, te recomiendo un cuentillo de García Márquez llamado Tramontana, habla de ese viento que te digo.
Te quiero mucho aunque seas furia…a final de cuenta sabes que eres a la Diosa, como una gota de agua es al océano.
Ay amiga, tú para todo tan poética…gracias por tu poesía…eres como el Rey Midas de las palabras, todo lo que dices se convierte en oro.